Mercurio retrógrado: ¿Cómo nos afecta?

La Astrología, una disciplina que ha fascinado a la humanidad desde tiempos inmemoriales, sugiere que los movimientos planetarios influyen en nuestras vidas y personalidades.

Entre todos los cuerpos celestes, Mercurio se destaca por su impacto en la comunicación y la mente. Especialmente intrigante es el fenómeno de Mercurio retrógrado, un evento astronómico que, según los astrólogos, puede sembrar caos en nuestras interacciones diarias.

Mercurio retrógrado es un término que suena a magia y misterio, pero en realidad se refiere a un fenómeno óptico.

Desde nuestra perspectiva en la Tierra, parece que Mercurio se mueve en dirección contraria a su trayectoria habitual. Sin embargo, esto es solo una ilusión causada por la diferencia de velocidad entre la Tierra y Mercurio en sus órbitas respectivas.

Becky Smethurst, astrofísica de la Universidad de Oxford, lo explica de manera sencilla: «Es como cuando pasas a otro coche en la carretera; parece que va hacia atrás, pero en realidad es solo una cuestión de perspectiva».

Calma y cautela

Dado que Mercurio está asociado con la comunicación y los procesos mentales, durante sus fases retrógradas es común experimentar dificultades para expresarse claramente. Podrías encontrarte luchando con lapsus, olvidos o simplemente sintiéndote más torpe en tus interacciones. Es recomendable evitar debates intensos, críticas o reencuentros con personas del pasado.

Además, es un período poco favorable para realizar viajes importantes o firmar contratos. La tecnología también puede jugar en tu contra, con posibles fallos en dispositivos electrónicos o sistemas de comunicación.

En estos períodos, lo mejor es adoptar una actitud de cautela y reflexión. Antes de hablar o enviar mensajes, tómate un momento para pensar. Revisa dos veces cualquier documento importante y mantén la calma ante contratiempos inesperados. La paciencia será tu mejor aliada, ya que no todo saldrá según lo planeado.

Aprovecha este tiempo para reflexionar y reconsiderar tus planes y decisiones, en lugar de lanzarte a la acción impulsivamente.

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